Los deseos más difíciles de cumplir se forman con las palabras “Ojalá", "Quién" y el suspiro "Ahhhhh” y con el el modo subjuntivo también, pero en el tiempo imperfecto:
Depende de qué tan improbables:
Ojalá que le pegara al gordo con este billete de lotería.
o depende de que tan imposibles sean:
Ojalá que los gobernantes devolvieran lo que se han robado.
Quién + subjuntivo imperfecto es la expresión del deseo de ser otra cosa o alguien más; de las ganas de tener lo imposible.
¡Quién pudiera navegar por los siete mares en un velero!
¡Quién tuviera el poder de volar como Superman!
¿Que te vas a Tailandia de viaje? ¡Quién fuera tú!
Y el “Quién… quién fuera…" es la expresión reina de los piropos y los dobles sentidos o albures:
¡Quién fuera gato, para pasar siete vidas a su lado!
¡Quién fuera noche, para caerle encima!
Hay otra expresión, la que se suspira y empieza por una condicional… "Ah… si…"
Ah… si yo fuera rico...
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